24 de marzo de 2012

Hoy viernes: Balada de la izquierda (13/03/2012)

Los duendes que andan por mi casa, mordiendo papeles y perdiendo bolígrafos, me han dejado abierto en una silla un ejemplar de El País de principios de campaña. En la página llama la atención una foto de Arenas y Rajoy en un mitin. Los han congelado a los dos caminando y saludando de tal forma que parece que lo hagan al modo romano. Como fascistas de Fellini. Ya saben, ninguna información es neutral ni inocente. En el faldón, hay un artículo de Concha Caballero en el que se pregunta cómo es la derecha andaluza, de la que dice que “apenas sabemos nada”. He pensado enseguida que a la que sí conocemos muy bien es a la izquierda, al menos esta supuesta izquierda de aquí.

Hace mucho que me siento ideológicamente huérfano. Uno tenía su izquierda de padre jornalero, su república como una maestra de la que uno se enamora de chico, y luego había una derecha que nosotros conocíamos por cuentos de guardias civiles, por habladurías de tenderos que iban con pistola en la temprana transición, por chavales del instituto a los que se les decía fachas, con banderita y pollo en los relojes y en el vespino. Yo era chiquillo cuando España también era chiquilla en democracia. Después he sentido que crecíamos los dos un poco a la vez. Con 19 años, voté a Felipe, cuando era Felipe. Ya declinaba pero recuerdo que las amas de casa aún lo votaban como a Julio Iglesias. La derecha iba modernizándose pero todavía tenía muchos tics de los de espada y crucifijo. Fui descartando a IU por antigua, por hablar de un mundo imposible, y luego fui bandeando entre partidos según las decepciones o el asco. Le di mi voto a Zapatero las dos veces y al final me arrepentí. He votado cosas raras, un partido en una urna y otro diferente o contrario en la de al lado. He tenido épocas de nihilismo político. Y, viendo que ningún partido me conquistaba para siempre, creo que ya sólo pienso en quién podría arreglar las cosas mejor. Mi izquierda no está, pero algo habrá que hacer.

¿Cómo es, pues, esta supuesta izquierda que nos ha gobernado aquí? Una izquierda de nombre, de pose, de himno, de retrato, pero que nos ha paralizado, que ha creado estructuras caciquiles y hasta mafiosas de poder, que se ha apropiado de Andalucía y hasta de la misma democracia, que se ha corrompido, que se ha dormido y nos ha dormido, que nos trata como a niños, que nos ha traicionado. Cómo nos habrán dejado que la campaña del PSOE se basa casi exclusivamente en la paternal ayuda a desvalidos, pobres, enfermos, parados, desamparados, asumiendo que ése es el núcleo de Andalucía. Después de 30 años, nos dejan una región que aún se resume en la miseria, la precariedad y la necesidad. Es triste e insultante. ¿Izquierdas, derechas? Ya sólo pienso en quién nos sacará del pozo, en quién le devolverá la honradez a la política y el respeto al andaluz. Y no sé quién será, pero este PSOE, seguro que no.

1 comentario:

Manolo Fernández dijo...

Sr. Fuentes, me encanta su blog y le escribo para desearle una larga trayectoria. La entrada de hoy me ha gustado especialmente, porque me identifico mucho con lo que usted dice. Yo, en las elecciones, presumo de no haber votado nunca ni al PSOE ni al PP, pero mi voto ha cambiado varias veces, aunque desde hace unos años, ni me molesto en votar. Saludos.