20 de noviembre de 2006

Somos Zapping 19/11/2006

De la carreta al Audi. Esos dineros como muchos brazaletes, esas mujeres como las lámparas que cuelgan en Contraportada, esa corrupción con refajo, con salve y con cornamenta, todo eso ha llevado desde el principio el escándalo de Marbella a la tomatería televisiva, frivolizando su gravedad, confundiéndolo con bigotes y encamamientos, y sobre todo despistándonos de los jefes, que no son tonadilleras ni freidoras de huevos. El último Dolce Vita fue una vomitona y si de la justicia, de la economía y de la política se acaba hablando en los programas de cotilleo, con falsos periodistas huelebraguetas, todo el rigor y todo el tamaño del asunto va a perderse tras el paraguas o las patillas de la Pantoja. En el guiñol de Eva Hache ironizaban sobre ésto precisamente imaginando a Solbes y a Fernández de la Vega presentando un supuesto Aquí hay ladrillo. Por eso me complació mucho escuchar a Manuel Hidalgo (ay, cuánto echamos de menos leerlo algunos por aquí), en Los desayunos de la Primera, diciendo una verdad que va más allá de los nombres, y es que todo esto de Marbella es “un reflejo de la sociedad española, profundamente hortera y macarra, impulsada por las televisiones privadas”. Bueno, las públicas tampoco es que anden mucho a la zaga, que si bien en Canal Sur hay orden de Zarrías de no meterse con la Pantoja, las horteradas se compensan por otros lados. Después de Hidalgo, pudimos escuchar también la voz azurronada de Labordeta, dejando esta imagen certerísima: “Mucha gente ha pasado de la carreta al Audi 100 y sigue conduciendo el Audi con la misma cara que llevaba en la carreta”. Pero los peces gordos de la cosa, ésos que no tienen líos con tonadilleras ni enseñan los tigres forrados de diamantes, me pregunto cuándo los veremos en el telediario o en el Tomate. O es que nos están contentando con la morralla mientras los capos se ríen viendo a sus subalternos en los zappings.

Misionera de lo andaluz. Si a lo hortera se le añade un piano, lo que queda es algo así como la horterada en su transatlántico. Las folclóricas con piano, su musiquilla con frac, su melena planchada por violines. A las folclóricas así se les pone la sonrisa como toda una octava, la bata de cola se les hincha como un foque y creen que una dignidad de teatros de la ópera y de batutas de plata desciende sobre el clavel del canalillo igual que en una coronación. De Isabel Pantoja en Rusia se me ha quedado, más que otra cosa, la imagen del piano junto a ella como un catafalco y de la orquesta detrás formando cortina. Algo como demasiado escenario, demasiado dorado o demasiado violonchelo para tan pequeña cosa, ese querer ser sinfónica con una música suya que es de tendedero. Isabel Pantoja se fue a Rusia en una especie de misión cristiana de lo español o lo andaluz. A las folclóricas les gusta sentirse internacionales, pero es una internacionalidad de cocinera o lateral izquierdo, que no es cosmopolitismo sino un trasplante de su barrio en las tundras o las Américas. Hay una universalidad de lo andaluz, que puede ser el flamenco, que suena igual en cualquier punto del planeta porque es arte. Pero luego hay un andaluceo intransportable, que son esas tonadas de la radio local y esa estética de su virgencita que fuera de aquí sólo quedan batusi. En la tele hubo polémicas sobre el lleno del teatro y las entradas regaladas. A mí sólo me recordó ese catetismo del que sale fuera y cree que le entienden los chistes y los majados de su pueblo.

Serenidad parlamentaria. “Con plante serio y muy formales, tal como invita la serenidad de la cámara andaluza, así hemos visto a estos 60 estudiantes que se han convertido en diputados por un día”. Así presentaba el locutor de las noticias de Canal Sur ese día Disney del Parlamento Andaluz, ocupado por chiquillos. La serenidad del Parlamento, ¿será por el sueño, la parálisis y los ecos en los que se resume su actividad? ¿Será la serenidad de algunos al votar con los pies sin inmutarse? ¿La serenidad con la que Chaves torea las preguntas sobre la deuda histórica o sus hermanísimos? ¿O la serenidad con la que salen casi menos leyes que comisiones de investigación? Piensen serenamente.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

MANOLO CARRASCO EL MEJOR PIANISTA ANDALUZ

Anónimo dijo...

ESTA NAVIDAD EL EL PALACIO VISTALEGRE PRESENCIE EL ESPECTACULO PASSIONATA ANDALUZA VALLA PEDAZO DE PIANISTA QUE VI "MANOLO CARRASCO" QUE MELODIAS MAS BONITAS. ACONSEJO QUE VEAN A ESTE PIANISTA Y SU ESPECTACULO
CREO QUE TAMBIEN ES COMPOSITOR
DISFRUTE DE LO LINDO, Y MIS HIJOS TAMBIEN.